16 de agosto de 2013

Sonidos del mundo; Rototom


«Papa, ¿cuánto falta para el Rototom?» Eso me preguntó mi hijo de ocho años el día en que empezó las vacaciones. Y de hecho cualquiera que haya pasado alguna vez por este festival, probablemente mostrará la misma ilusión cuando piense en él.
Un año más Benicàssim se vestirá de banderas rojas verdes y amarillas y repartirá sonrisas a aquellos que lo visiten.
Y es que el Rototom Sunsplash no es un festival veraniego más; se trata de un encuentro de culturas en todo su sentido.
Damian Marley en cuanto a lo musical y Rigoberta Menchú en lo social podrían ser catalogados como cabezas del programa de esta Love Edition que celebra el 20º aniversario de este festival nacido en Italia.
Pero son ocho los días en que cinco escenarios van a llenarse de todo tipo de grupos y artistas, sumando un total de 30 conciertos diarios. Si bien el hilo conductor es la cultura rastafari, la diversidad de estilos y formaciones da una idea de la salud de este genero musical y del buen criterio de los organizadores.
Además de grandes bandas, jamaicanas y de los cinco continentes, un programa social repleto de debates, talleres y conferencias, el Rototom cuenta con una gran oferta de actividades para niños y mayores que completan un cartel que va mucho más allá de la música.
El Foro Social con conferencias y debates, proyectos como la Reggae University, junto con los juegos y diversión del Rototom Circus o el Mágicomundo son solo algunas de las otras propuestas.
Y si alguna cosa han sabido aprovechar de la ciudad de Benicàssim es su fantástico clima y la playa donde el espacio Sunbeach permite acercarse a las danzas de todo el mundo y propone entretenimiento durante todo el día.



Pasar esos ocho días, o los que se puedan, acampados en la zona reservada es como vivir unas vacaciones sin parar de viajar. No en vano el año pasado se registraron más de cien nacionalidades entre todo el público asistente.
Los viajes del Barquito no se quiere perder esta oportunidad de vivir de cerca todo esto y tenemos previsto recoger un poquito de cada rincón del planeta.
Nos aventuramos a pensar que entre las páginas del próximo número, o entre sus vídeos y fotos, os podremos acercar un poquito a este pequeño mundo llamado Rototom, y que así podáis sentir la misma ilusión que un niño al empezar las vacaciones.